Presunto narcotraficante intenta comprar ametralladoras y & lanzagranadas destinadas a México
Ciudadano estadounidense ahora reside en Tijuana arrestado
LOS ÁNGELES – Un gran jurado acusó a un ciudadano estadounidense que reside en Tijuana, Méjico, de múltiples acusaciones relacionadas con arma de fuego, drogas y explosivos por presuntamente comercializar heroína y fentanilo por armas de fuego, lanzagranadas y supuestas granadas.
Pedro Roberto Hernández-Gómez, de 31 años, fue acusado de poseer ametralladoras, intentar transportar explosivos, ser un delincuente que posee armas de fuego, distribución de heroína y distribución de fentanilo.
En Diciembre de 2019, Hernández-Gómez acordó proporcionar heroína y fentanilo a cambio de varias ametralladoras, lanzagranadas, granadas y armas cortas durante lo que Hernández-Gómez creía que eran negociaciones con traficantes de armas de fuego, pero de hecho era una operación de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).
El 7 de enero de 2020, Hernández-Gómez vino a Los Angeles, donde proporcionó 1 kilogramo de heroína y 1 kilogramo de fentanilo y renegoció la cantidad de armas de fuego y granadas a cambio de la heroína, según una declaración jurada federal. Hernández-Gómez aceptó intercambiar los narcóticos por tres ametralladoras Bushmaster de 5,56 mm, tres lanzagranadas de 40 mm y 72 granadas inertes (que pensó que eran explosivos vivos).
Hernández Gómez, un delincuente condenado que no tiene permitido poseer armas de fuego, fue arrestado poco después de cargar las armas de fuego en su camioneta. Según la declaración jurada, admitió que planeaba transportar las armas y los explosivos de regreso a Tijuana, México.
“Este es un excelente ejemplo de los tipos de objetivos criminales violentos de la ATF junto con la asociación de la Oficina del Fiscal Federal”, dijo el Agente Especial a Cargo de la división regional de Los Angeles de la ATF, Carlos A. Canino. “Está claro que estas ametralladoras y lanzagranadas estaban destinadas a grupos criminales mexicanos. La ATF trabaja diligentemente para detener los esquemas de tráfico arma de fuego para que las armas no terminen en manos de criminales, pandillas o cárteles, y seguiremos haciéndolo”.
Esta fue una investigación de la ATF. Este caso está siendo procesado por la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Central de California. El fiscal federal adjunto Kevin B. Reidy es el fiscal.
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